Las rabietas. Si tu niño está pasando por esta etapa, te deseamos buena suerte. No es algo lindo y no todos los padres saben cómo lidiar con esto. Pero, como siempre, hay que darle un enfoque desde la psicología, para saber cómo tratar con ello. Un experto te enseña un poco de algunas técnicas necesarias a la hora de tratar con un niño que tiene una rabieta.
Álvaro Bilbao es neuropsicólogo y padre de tres niños, además de autor de libros de paternidad. Él aclara qué es lo que no hay que hacer en el momento de una rabieta, porque realmente no funciona y puede empeorar la situación.
Métodos que no funcionan al tratar las rabietas
Gritar
Gritar en plena rabieta no es para nada eficaz. Intensificará el problema: "Activarás tres de las áreas cerebrales que intervienen en las rabietas: el miedo, la frustración y la incomprensión intensificarán la rabieta", explica en Instagram Álvaro Bilbao.
Abandono
Dejarlo solo tampoco es recomendable: "Espérale, dale el tiempo que necesite y si no tienes tiempo llévatelo en brazos...pero no le hagas sentir abandonado", dice Bilbao.
Contención física
Que se tiren al suelo es su forma de liberar tensión, por lo que no es aconsejable sujetarlos por la fuerza, a menos que puedan hacerse daño: "El pataleo es la forma natural de liberar tensión emocional. No lo contengas a menos que se esté golpeando o haciendo daño", recomienda.
Hacerles sentir vergüenza
El experto explica: "Los niños de 2 y 3 años no pueden contener ni manejar las emociones fuertes, necesitan desgastarlas. Así que la vergüenza les dará igual", sugiere Álvaro Bilbao en su red social.
Amenazas
De lo peor que puedes hacer. Bilbao asegura que una amenaza no aporta nada: "El niño enrabietado ya está herido en su ilusión y orgullo. ¿Qué puede aportar una amenaza?", reflexiona. Así que nada de: “Si te sigues comportando así” y todo lo demás.
¿Ya sabes que es lo que no hay que hacer?