Jennifer es una de las miles de personas en el mundo que hacen homeworking. Es decir, trabaja desde casa. Estaba en una videollamada con otras 9 personas, por la plataforma zoom, cuando tuvo ganas de ir al baño. Se levantó y orinó con la puerta abierta durante su incursión al cuarto de baño, sin percatarse de un pequeño pero significativo detalle. No desactivó la cámara y todos vieron el momento en el que la mujer hizo sus necesidades fisiológicas. Mira en el vídeo cómo reaccionó al darse cuenta de que todos la observaban riéndose mientras iba al sanitario.
Aplicaciones para hacer videollamadas
Para hacer videollamadas y trabajar mejor desde casa, hay varias plataformas que te serán muy útiles. La principal es Skype. Esta fue una de las primeras en ofrecer el servicio y se extendió rápidamente por el mundo. Tiene versiones para smartphones, tablets en Android, iOS y Windows Phone. La resolución de imagen y sonido en Skype va desde 320×240 px hasta HD.
El Facetime es exclusivo para los usuarios de Apple. Se puede usar desde un ordenador de Apple, un iPhone o un iPad. Tiene una buena calidad, pero su principal fuerte es la exclusividad entre usuarios Apple.
Otra app es Google Hangouts. Se trata de la versión de google para realizar videoconferencias donde se pueden integrar hasta diez personas a la vez. También se puede grabar la transmisión. Viber es una aplicación de llamadas gratuitas a través de VoIP. También hay videoconferencias entre sus funciones.
Pero, WhatsApp es el rey de la mensajería instantánea y ofrece, además, videoconferencias. Zoom, que fue la app con la que Jennifer pasó vergüenza, es una de las más usadas para este tipo de reuniones. La mayoría la utiliza porque se pueden añadir hasta a 1000 personas, pero la calidad visual y auditiva depende de la conexión a internet de cada participante.
¡Cerciórate siempre de desconectar la cámara y el audio antes de ir al baño!